viernes, 20 de abril de 2012

ENSAYO SOBRE RENE DESCARTES


Ensayo sobre René Descartes
También llamado Cartesius, nació en  la Haye, en la Turena Francesa,  el 31 de marzo de 1596 y murió  en Estocolmo, 11 de febrero de 1650, fue un filósofo, matemático y físico francés, considerado como el padre de la filosofía moderna, así como uno de los nombres más destacados de la revolución científica, a este filósofo se le conocía como Cartesius, que era la forma latinizada en la cual escribía su nombre, este deriva de  la palabra cartesiano, formuló el célebre cogito ergo sum, elemento esencial del racionalismo occidental, el mismo escribió una parte de sus obras en latín, que era la lengua internacional del conocimiento y la otra la realizó en francés, así mismo en física está considerado como el creador del mecanicismo como en matemática, de la geometría analítica, no obstante, parte de sus teorías han sido rebatidas teoría del animal-máquina, o incluso abandonadas, teoría de los vórtices.  
Su método filosófico y científico, que expone en reglas para la dirección de la mente (1628) y más explícitamente en su discurso del método (1637), establece una clara ruptura con la escolástica que se enseñaba en las universidades, el mismo está caracterizado por su simplicidad en su discurso del método, únicamente propone cuatro normas y pretende romper con los interminables razonamientos escolásticos, de ahí, que toma como modelo el método matemático en un intento de acabar con el silogismo aristotélico empleado durante toda la edad media, consciente de las penalidades de Galileo por su apoyo al copernicanismo intentó sortear la censura disimulando de modo parcial la novedad de las ideas sobre el hombre y el mundo que exponen sus planteamientos metafísicos, unas ideas que supondrán una revolución para la filosofía y la teología.
Este filósofo y matemático francés ejerció una gran influencia en el pensamiento europeo del siglo XVIII, su discurso del método, para conducirla correctamente a la razón y buscar la verdad en las ciencias,sirvió de fundamento para que los intelectuales europeos tuvieran una profunda confianza en la razón y en la ciencia, debe señalarse, que su obra ocupa indudablemente un lugar fundamental en la filosofía francesa del siglo XVIII, además, fue el primero en romper con la Escolástica, sustituyendo el libre examen y creando el mecanicismo científico, por esta razón,  Ortega dijo de él, que había sido “el primer hombre moderno”, su obra más importante El discurso del método, escrita en 1637, nos presenta la metafísica cartesiana.
            Cabe considerar por otra parte, pero dentro del mismo contexto, que para este filósofo, nada le parecía merecer confianza, todo el pasado filosófico se contradice, según él, los sentidos nos engañan con frecuencia y, en muchas ocasiones, caen en el error. Descartes hizo de la duda el método mismo de su filosofía, para él,“Dios”da al ser  absolutamente libre, en un acto único crea todas las cosas, las esencias y las existencias, las “verdades eternas”, que son las que gobiernan el universo y regulan nuestra razón. Dios está por encima del principio de contradicción, concluyó que no sabemos si existe Dios, es decir, pero tampoco lo contrario, no sabemos si hay Dios, pero, si lo hay, no puede engañarse, prueba su existencia diciendo que es una idea que se encuentras en la mente y es la de un ser infinito.
Por lo tanto, es  perfectísimo, omnipotente,  si esta idea no puede proceder de la nada, ni de mí mismo, que soy finito, imperfecto y lleno de duda, el efecto sería entonces superior a la causa y esto es imposible. Por tanto, la idea de Dios tiene que haber sido puesta en mí, por algún ente superior, es decir, por Dios mismo, con lo que prueba su existencia, ya para el año de 1641 escribió Las meditaciones, tratando de construir su metafísica de acuerdo con el método, partió de la duda crítica y creyó que sólo había algo seguro, la certeza de la existencia por el pensamiento (cogito, ergo sum, pienso, luego existo), soy, decía Descartes, en la medida en que pienso, en consecuencia, dice,  soy una realidad pensante efectivamente, sólo hay una cosa que no puede ser falsa, su existencia, en esta misma obra afirmaba que si concibo la definición de un ser perfectísimo, incluye su existencia, la conclusión es indudable.
            Por otra porte, Descartes se da cuenta que la única manera de evitar el error es centrarse en cómo se llega al conocimiento, y construye una filosofía centrada en el método, la principal pregunta que se hace Descartes es ¿cómo se hace para llegar a la verdad libre de toda duda? Por lo tanto transforma la duda en un método, es decir, se trata entonces de descubrir una propuesta de la cual no se tenga la más mínima duda, sin caer en la formulación de conceptos sino que se logre en forma inmediata, o sea que entre el objeto y el observador no haya nada, entonces descubre que el pensamiento mismo es lo único capaz de alcanzar esa condición de inmediatez, el dice que, “puede dudar de sus percepciones pero de lo único que no puede dudar es de que está pensando”.
Es decir, de estar consciente es de lo único que no puede dudar, de tal modo que para Descartes, lo que verdaderamente existe es el pensamiento, y formula la famosa frase que lo lleva a la inmortalidad: “Pienso, luego existo”, este es  el origen del idealismo, de lo que sí puede dudar es de lo que está más allá de su pensamiento, o sea de lo que alcanza a percibir en forma mediata a través de sus pensamientos.
            Después de lo anterior expuesto,Descarte, tiene una concepción del aprendizaje, que se basa, primero, duda metódica, en busca de una certeza, que decidió rechazar como falsa, toda afirmación de la que se pudiese dudar, segundo, duda del conocimiento sensible, los datos de los sentidos no son seguros, podemos dudar de ellos, de hecho, los sentidos nos engañan a menudo, incluso no hay indicios ciertos para distinguir el sueño de la vigilia, por lo que todo lo que percibimos por los sentidos podría no ser real, en consecuencia, todos los datos de los sentidos, inclusive el propio cuerpo, quedan a un lado en esta búsqueda de la certeza.
Tercero, criterio de verdad, Descartes analiza su primera certeza para descubrir las notas distintivas que le servirán de criterio para identificar otras afirmaciones verdaderas, la afirmación “Pienso, existo” se presenta  a la conciencia con claridad y distinción, por lo tanto, serán aceptadas como verdaderas aquellas ideas que sean claras (ciertamente presentes a la conciencia) y distintas (no confundidas con otras ideas), cuarto, existencia de Dios, a pesar de haber encontrado una certeza absoluta (“Pienso, existo”), a partir de ella un criterio de verdad, de todos modos sigue en pie la duda que sobre todo otro conocimiento nos genera la Hipótesis del Genio Maligno.
Debo concluir afirmando que la obra del filósofo  antes mencionado es de importancia para el desarrollo científico, y al mismo tiempo filosófico, porque, con el método de Descartes, comienza con el rechazo de estas formas tradicionales de pensar sobre la verdad, de ahí, se mantendrá  una actitud escéptica hacia todo lo que ha aprendido y todo lo que podemos percibir con sus sentidos.


REFERENCIAS:
•Juan Carlos Moreno Romo (Coord.), Descartes vivo. Ejercicios de hermenéutica cartesiana, Anthropos, Barcelona, 2007.
•Juan Carlos Moreno Romo, Vindicación del cartesianismo radical, Anthropos, Barcelona, 2010.
•Martin Heidegger: «La época de la imagen del mundo»; en Caminos de bosque, Ed. Alianza, Madrid, 1995 y 1998. Trad. de Helena Cortés y Arturo Leyte.

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